10% de las tierras de la costa en manos extranjeras
Solo Odebrecht y Maple controlan el 3%
Publicado: 04 junio, 2013
Actualmente, la
Costa peruana contaría con 863 mil hectáreas de tierras de cultivo [1]. De esta
superficie, cerca del 10% tendría algún grado de participación de
inversionistas extranjeros (ver cuadro), ya sea de forma independiente o como
accionista mayoritario o minoritario de capitales peruanos.
En el Perú nadie
ha puesto en tela de juicio la compra de inmuebles rurales por parte de
extranjeros, debido a que se ha venido considerando su participación como
marginal en comparación a grupos económicos nacionales como Gloria, Oviedo o
Romero.
A diferencia de
Perú, en otros países de Sudamérica se limita o prohíbe la transferencia de
terrenos agrícolas a extranjeros, sean personas naturales o jurídicas. Buena
parte de estas medidas son de índole geopolítica, y tienen por objeto limitar
la adquisición de tierras por parte de extranjeros en zonas de frontera o de
seguridad.
Sin embargo, en
los últimos años, algunos gobiernos de la Región han decidido reforzar otro
conjunto de herramientas legales para enfrentar fenómenos concretos de
extranjerización de la tierra que vienen ocurriendo en sus territorios.
Por ejemplo, la
vigente Constitución de Bolivia prohíbe a los extranjeros adquirir tierras del
Estado. En Brasil la adquisición de inmuebles rurales por parte de extranjeros
está sujeta a la fiscalización del Estado y, en el mejor de los casos, no puede
superar la cuarta parte (1/4) del territorio de los municipios. El gobierno
argentino, por su lado, ha introducido recientemente una serie de restricciones
a la extranjerización de la tierra (Ley Nº 26.737), como el límite de quince
por ciento (15%) a toda titularidad de tierras rurales por parte de
extranjeros.[2]
A pesar de esto,
las expectativas de que alguna de estas medidas tenga éxito son reducidas,
tomando en cuenta que las disposiciones que prevén para contrarrestarlo no
tendrán efectos hacia atrás (irretroactivas) y que la extranjerización de la
tierra en estos tres países es un fenómeno sumamente extendido[3].
Un reciente
estudio auspiciado por la FAO indica que en Argentina 6 millones 722 mil
hectáreas estarían bajo el control de inversionistas extranjeros. En Brasil,
los datos arrojan 4 millones 348 mil hectáreas extranjerizadas, y en el caso de
Bolivia, inversionistas extranjeros, principalmente brasileros y argentinos,
poseerían más de un millón de hectáreas de las mejores tierras agrícolas y
ganaderas.[4]
El Perú ni por
asomo tiene la cantidad de tierras de los tres países mencionados. El año 2011,
por cada peruano existía apenas 0,15 de una hectárea cultivable, muy por debajo
de los promedios de Argentina (0,96), Brasil (0,40) y Bolivia (0,40).[5]
Sin embargo, la
escasez de tierras en nuestro país no ha sido impedimento para la llegada de
inversionistas extranjeros, principalmente en la Costa donde se concentran las
tierras de mejor calidad y la inversión pública en mega proyectos agrícolas
como Chavimochic, Olmos, Chinecas, etc.
Como se mencionó
anteriormente, de las 863 mil hectáreas de tierras de cultivo que tiene la
Costa, aproximadamente 84 408 hectáreas, casi el 10%, tendría algún grado de
participación de inversionistas extranjeros, como se puede ver en el siguiente
cuadro.
Con estos datos
a la vista es momento de prestar atención a la adquisición de inmuebles rurales
por parte de extranjeros, examinar qué efectos ha tenido en otros países de la
región y proponer medidas preventivas para que no amenace la seguridad
alimentaria o acentúe las desigualdades.
El ascenso en la
demanda global de alimentos y madera, sumada a las políticas que promocionan la
producción de biocombustibles y proyectos de conservación y compensación del
carbono, constituyen poderosos incentivos para que inversionistas extranjeros
incrementen su participación en la adquisición de inmuebles rurales, desde
nuestra perspectiva es importante saber ¿Cuál será el costo?
Notas:
[1] Esta cifra considera las
aproximadamente 779 mil ha de riego que figuran en el Censo Nacional
Agropecuario de 1994, y las 84 mil hectáreas que se habrían ganado producto de
las obras de irrigación de Olmos y Chavimochic.
[2] Un límite
específico de mil hectáreas abarca la zona denominada «núcleo», que integran
los departamentos y partidos de Córdoba, Santa Fe, Buenos Aires, Pergamino,
Arrecifes y Carmen de Areco, considerada la de mayor aptitud agrícola de
Argentina.
[3] Por esa
razón, es más probable que Argentina, Brasil y Bolivia hayan decidido reforzar
el control de la extranjerización de su territorio de manera preventiva,
teniendo a la vista el informe de la FAO que indica que forman parte del grupo
de siete países que concentran más de la mitad de la tierra con potencial para
la producción agrícola mundial.
[4] En FAO
(2012). Dinámicas del mercado de la tierra en América Latina y el Caribe:
concentración y extranjerización.
[5] Según los
perfiles de país de FAOSTAT.
[6] El socio
mayoritario de Camposol es la familia peruana Dyer que tiene una participación
del 33.2% en el número de acciones. Pero hace pocas semanas la empresa Golden
Target Pacific Ltd, controlada por el grupo económico chino Ng, habría
adquirido el 11.3% de las acciones de la empresa, y junto al Deutsche Bank AG
(Alemania) que ya manejaba el 14.58% de las acciones se convierten en los dos
principales socios minoritarios de Camposol.
[7] Según la
Superintendencia del Mercado de Valores, además del Grupo Wong (Perú) que tiene
un importante paquete de acciones de Andahuasi a través de su empresa Río
Pativilca S.A, figuran como accionistas minoritarios las siguientes empresas
domiciliadas en Panamá: Ducktown Holdings S.A con el 17% de acciones;
Inversiones Dagomar S.A. con 16%; y Zabuck International INC con el 13% de
acciones.
[8] Según la
Superintendencia del Mercado de Valores, el accionista mayoritario de Pucalá es
la empresa estadounidense Cromwell Assets S.A. con una participación del 51% en
las acciones de la azucarera.
Publicado en: http://www.observatoriotierras.info/monitoreo/15026
Más información:
Observatorio de Tierras
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